¿Sabías que el frigorífico es el electrodoméstico que más consume del hogar? ¿Qué el Stand by del televisor consume tanto como un ordenador a pleno rendimiento? ¿Y que la plancha es el pequeño aparato que más picos de potencia produce? Los electrodomésticos son responsables de más del 50% del consumo de energía eléctrica en el hogar. Ser consciente del gasto de cada uno de ellos nos ayudará a tomar medidas eficientes para ahorrar en nuestros recibos.

Según el “Estudio sobre consumo energético del sector residencial en España” del IDAE, los hogares españoles gastan de media 990 euros anuales en consumo eléctrico, de los cuales 546 euros corresponden al consumo de los electrodomésticos. ¿El que más consume de todos? El frigorífico: se lleva más del 30% de la energía.


Elegir una nevera eficiente en la compra inicial nos puede ayudar a ahorrar mucho dinero. Aunque el precio inicial es superior, la inversión se rentabiliza en poco tiempo al compensarse con el ahorro de luz a lo largo de la vida útil del aparato. Un ejemplo: un frigorífico clase A+++ puede consumir un 80% menos de energía que uno de clase D aproximadamente. Esto supone, a lo largo de la vida útil del aparato, evitar la emisión a la atmósfera de una tonelada y media de CO2 y un ahorro de más de 1.000 euros.

El televisor es otro de los aparatos que más consumen en nuestro hogar con más de un 12% de la energía. Y uno de los grandes culpables de este consumo es el Stand by. Este ‘consumo fantasma’ -sólo en la televisión- gasta tanta electricidad como un ordenador a pleno rendimiento.

En cuanto al resto de electrodomésticos, el horno consume un 8,3% del total de la factura energética, la lavadora y el lavavajillas suponen un 11,8% y un 6,1% respectivamente, y el ordenador un 7,4%. Elegir una lavadora clase A+++ puede consumir casi la mitad de energía que una de clase D. Esto se traduce en un ahorro de más de 500 euros en la factura eléctrica. Además, se evitaría la emisión a la atmósfera de más de media tonelada de CO2, y el consumo de más de 35.000 litros de agua.

Si hablamos en kilovatios-hora, la Organización de Consumidores y Usuario (OCU), detalla que los electrodomésticos que más consumen son: el frigorífico con 662 kWh, el congelador con 563 kWh, la televisión con 263 kWh, la lavadora con 255 kWh, la secadora con 255 kWh y el lavavajillas con 246 kWh.

Aprende a ahorrar en tu factura de la luz

Una vez que ya hemos identificado los electrodomésticos que más consumen en casa, es fundamental tomar medidas sencillas y rutinarias que harán que ahorremos muchos euros en el recibo de la luz.

- Frigorífico. Es importante no dejar la puerta abierta para evitar que el motor trabaje demasiado. Introducir alimentos muy calientes incrementa el esfuerzo del frigorífico por enfriar y consume más. Mantenerlo en buenas condiciones nos puede suponer un ahorro del 25% de la energía consumida.

- Televisores y ordenadores. Aquellos aparatos que incorporan tecnología LED consumen un 25% menos que las LCD y hasta un 40% menos que las pantallas de plasma. Muy importante apagar siempre el Stand by.

- Lavadora. Utilizar programas cortos y lavados en frío o hasta 30º (la mayor parte de la energía se utiliza para calentar el agua) nos ayudará a ahorrar electricidad y a gastar menos agua.  Mejor poner la lavadora cuando esté llena.

- Horno. Intenta no abrir el horno mientras esté encendido. Cada vez que se abre la puerta se pierde al menos un 20% de la energía acumulada en su interior. Otro consejo: cocina de una vez el mayor número de alimentos.

- Lavavajillas. Usa programas cortos y a menor temperatura para ahorrar energía. No te olvides de cargarlo siempre al máximo y de limpiar periódicamente el filtro.

- Secadora. Intenta encenderla ocasionalmente y a plena carga. Lo mejor para reducir su gasto: tender la ropa al sol.

- Cocina. Puedes aprovechar el calor residual de la cocina eléctrica o de la vitrocerámica: apágala cinco minutos antes de finalizar la cocción y ahorrarás energía.

- Plancha. La plancha es uno de los pequeños electrodomésticos cuyas altas potencias dan lugar a consumos significativos en la factura. Procura planchar el mayor número de prendas de una sola vez.