En la cocina, nos remite a esos platos que calientan y alimentan, a la vez que nos evocan a los aromas de esas deliciosas comidas familiares.

Y nos preguntamos… ¿por qué tenemos que reservar esos platos de cuchara al fin de semana o cuando estamos en casa? ¿Por qué no podemos disfrutarlos en la oficina?

Por ello hemos seleccionado 14 recetas tan ricas como las de nuestras abuelas y madres, la mayoría de elaboración sencilla y todas con el mismo objetivo: Comer bien y enriquecer nuestra dieta sea donde sea que trabajemos. ¿Preparado? ¡Que aproveche!

  1. Verduras estofadas
  2. Pisto de pimiento y tomate
  3. Sopa cremosa de alubias con verduras y parmesano
  4. Judiones de la granja
  5. Alubias al horno con salsa de tomate, cuscús y queso feta
  6. Verdinas estofadas con boletus
  7. Lentejas con escabeche de pechugas de pollo
  8. Crema de zanahoria
  9. Crema de setas
  10. Crema de calabaza al eneldo
  11. Sopa de fideos noodles al miso con atún y espinacas
  12. Sorropotún de bonito
  13. Patatas a la riojana
  14. Marmitako de bonito


Verduras estofadas



Ingredientes (para 2 personas)

  • 100 gr de cebolla
  • 1 diente de ajo
  • 1 zanahoria
  • 150 gr de judías verdes planas
  • 10 champiñones
  • 1 hoja de laurel
  • 1 tomate maduro
  • 40 ml de vino blanco
  • Caldo de verduras
  • Pimentón dulce
  • Pimienta negra molida
  • Sal
 

Preparación (paso a paso)

Dificultad: Fácil – Tiempo total: 30 min (10 de elaboración y 20 de cocción)

Apunte previo: Una receta sencilla y básica en la que todos los ingredientes van a la cazuela en crudo y se cuecen juntos. Por ello la clave de su éxito está en el corte de cada verdura (las más duras en trozos más pequeños y las más blandas en trozos más grandes), así con un mismo tiempo de cocción quedan todas al dente.

Pelamos y picamos finamente el diente de ajo y la cebolla. Pelamos la zanahoria y la cortamos en dados pequeños, que es la hortaliza más dura. Lavamos las judías verdes, retiramos los extremos y cortamos en tiras diagonales. Limpiamos los champiñones con un trapo húmedo y cortamos en cuartos. Cortamos el tomate por la mitad y lo rallamos (desechando la piel).

Colocamos todas las verduras en una cazuela. Añadimos una hoja de laurel, sal, pimienta negra molida al gusto y una cucharadita rasa de pimentón dulce. Regamos con el vino blanco y el caldo de verduras y llevamos a ebullición. Tapamos y cocemos a fuego medio-alto durante 20 minutos. Servimos inmediatamente.

 

Con qué las combinamos

Podemos servirlas como guarnición de carnes y pescados, además de como entrante o como plato único completándolo con un huevo duro.

Si no tenemos necesidad de dieta, un chorrete de aceite de oliva virgen extra les sienta de maravilla, con unos tacos de jamón y, por supuesto, un buen trozo de buen pan con el que mojar su rica salsa.

 


Pisto de pimiento y tomate



Ingredientes (para 4 personas)

  • 6 tomates
  • 2 pimientos verdes italianos
  • 1 cebolla
  • 3 cucharadas de aceite de oliva virgen extra
 

Preparación (paso a paso)

Dificultad: Fácil – Tiempo total: 1 hora (15 min de elaboración y 45 de cocción)

Apunte previo: Aunque el pisto se puede hacer utilizando tomate triturado con el que ligar un sofrito lento de cebolla y pimiento, lo mejor es utilizar tomates enteros partidos en trozos.

Primero, picar los tres ingredientes (tomates, pimientos y cebolla) en trocitos de tamaño similar. Lo ideal es cortarlos en cuadraditos para que todos se cocinen y queden bien blanditos y jugosos.

En la sartén ponemos 3 cucharadas de aceite y pochamos la cebolla y el pimiento, que necesitan mayor tiempo para estar a punto. Después incorporamos los tomates, que habremos pelado y picado en trocitos.

Dejamos que el conjunto siga cocinándose lentamente hasta que los trozos de pimiento estén bien tiernos y hasta que prácticamente se haya evaporado toda el agua que soltará el tomate.

 

Con qué acompañarlo

Hay dos posibles acompañamientos que pueden comerse juntos. Por un lado, unas patatas cortadas en cuadraditos funcionan estupendamente y por otro, un huevo frito para conseguir que nuestro pisto sea un plato completo de los que nos alegran la mesa.

 


Sopa cremosa de alubias con verduras y parmesano



Ingredientes (Para 6 personas)

  • 200 gr de alubias blancas
  • 1 cebolla morada o blanca
  • 1 puerro fino
  • 1 diente de ajo
  • 1 apio
  • 2 zanahorias
  • 1 nabo
  • 70 gr de repollo o berza
  • 15 ml de tomate concentrado
  • 125 ml de vino blanco
  • Caldo de verduras o agua (cantidad necesaria)
  • Queso Parmesano al gusto
  • Perejil fresco o tomillo
  • Pimienta negra molida
  • Sal
  • Aceite de oliva virgen extra
 

Preparación (paso a paso)

Dificultad: Fácil – Tiempo total: 2 horas y 15 minutos (15 min de elaboración, 2 h de cocción, además de 10 h de reposo)

Apunte previo: La única "dificultad" de este plato es acordarse de poner a remojo las alubias, preparar todas las verduras y tener paciencia para lograr la cocción perfecta.

El primer paso es colocar las alubias (previamente lavadas, si fuera necesario) en un recipiente grande bien cubiertas de agua fría durante unas 10 horas. Si las dejamos más tiempo, aún tardarán menos en cocerse.

Escurrir y enjuagar las alubias remojadas. Colocar en una cazuela o una olla grande con un chorrito de aceite de oliva y abundante agua limpia. Llevar a ebullición, reducir el fuego y dejar cocer hasta que estén tiernas. Dependiendo del remojo y la variedad, pueden tardar entre 90 minutos y las dos horas.

Mientras tanto lavar y preparar todas las verduras. Picar la cebolla, el puerro y el ajo pelados; pelar ligeramente las zanahorias y cortar en rodajas o medias lunas; retirar los filamentos del apio y picar en cubos pequeños; cortar en juliana la col y trocear el nabo.

Calentar un fondo de aceite de oliva en otra olla grande y pochar la cebolla con una pizca de sal. Añadir el puerro y el ajo, y cocinar unos minutos hasta que estén tiernos. Incorporar la zanahoria y el apio, el concentrado de tomate y dar unas vueltas. Agregar la col y el nabo, salpimentar, añadir el vino y dejar que reduzca.

Cubrir con caldo o agua y dejar cocer unos 30 minutos o hasta que las verduras estén muy tiernas. Vigilar el punto de líquido por si hiciera falta añadir más o dejar que reduzca a fuego vivo los últimos minutos. Triturar una parte para darle textura cremosa.

Incorporar las alubias a la olla de verduras cuando estén al punto deseado. Si le falta un poco, se puede cocer el conjunto a fuego lento unos 15-20 minutos más. Corregir de sal y agregar queso parmesano recién rallado y tomillo o perejil.

 

Con qué acompañarla

Un buen plato de cuchara pide un buen pan de miga consistente para redondear la comida. Si servimos una ración generosa no hace falta añadir nada más al menú, quizá un yogur natural de postre o algo de fruta ligera y digestiva.

En raciones más pequeñas, como primer plato, podemos montar un menú más completo poniendo de segundo un pescado (al papillote, por ejemplo) o carne (a la plancha).

 


Judiones de la granja



Ingredientes (para 6 personas)

500 gr de judiones de La Granja (pueden ser fabas si no los encuentras)

2 chorizos asturianos (o cualquier otro ahumado)

1 morcilla de cebolla

300 gr de lacón

100 gr de panceta

1 pluma de cerdo ibérico (una tira de mínimo 150 gr)

1 hoja de laurel

¼ de cebolla

Pimienta negra en grano (6 bayas)

 

Preparación (paso a paso)

Dificultad: Media – Tiempo total: 3 horas (3 h de cocción, más 2 h de reposo)

Apunte previo: La víspera, dejamos los judiones en remojo en un bol grande con agua abundante. Tened en cuenta que por su gran tamaño absorben mucho por lo que será necesario prever que tengan espacio y agua suficiente para no encontrarlos secos cuando los vayamos a cocinar a la mañana siguiente.

Por la mañana, tiramos el agua y ponemos a cocer los judiones con los chorizos enteros y el lacón y la panceta cortados en trozos en una olla con agua suficiente para cubrirlos y un poco más. Añadimos el laurel, la cebolla y las pimientas y dejamos que se cuezan a fuego lento (sin remover) durante dos horas y media (para esta legumbre, es preferible hacerlas a fuego lento, sin usar la olla exprés como cuando preparamos la fabada en 20 minutos).

Mientras, en un cazo aparte cocemos la morcilla para que no quede muy fuerte durante 30 minutos y la reservamos. Por otro lado, cortamos la pluma de ibérico (o un solomillo de cerdo, como alternativa) en trocitos y la salteamos en una sartén, reservando los trozos dorados junto a la morcilla.

Consejo: Vamos probando los judiones hasta que estén perfectos de punto. Serán necesarias unas tres horas aproximadamente, dependiendo del fuego y la calidad de las legumbres. Una vez en su punto, metemos dentro la morcilla y las tajadas de carne de ibérico y damos un último hervor de cinco minutos.

 

Con qué acompañarlos

Los judiones contienen todo lo necesario para servir como plato único. Con un buen vino tinto y un poco de pan, seréis muy felices. Es recomendable disponer de una tarde tranquila para hacer bien la digestión y reposar este delicioso manjar.

 


Alubias al horno con salsa de tomate, cuscús y queso feta



Ingredientes (para 2 personas)

  • 400 gr de alubias blancas cocidas en conserva
  • 80 gr de cuscús cocido
  • ½ de cebolla dulce
  • 1 diente de ajo
  • 1 hoja de laurel
  • 600 gr de tomate natural troceado
  • 2 gr de orégano seco
  • 2 gr de tomillo seco
  • 80 ml de vino tinto
  • 100 gr de queso feta
  • Perejil fresco (un manojo)
  • 1 limón
  • Pimienta negra molida
  • Sal
  • Aceite de oliva virgen extra
 

Preparación (paso a paso)

Dificultad: Fácil – Tiempo  total: 1 hora (20 m de elaboración y 40 m de cocción)

Apunte previo: Debemos tener ya las alubias cocidas en su punto, enjuagadas y escurridas, en su caso, y el cuscús también cocinado. Si usamos tomate natural podemos ir pelándolo tras escaldarlo en agua hirviendo. Se puede usar en conserva, troceado o entero, si es lo que tenemos en la despensa. Picar la cebolla y el diente de ajo.

Precalentar el horno a 200ºC y preparar una fuente alta de tamaño mediano, ovalada, redonda o rectangular, lo que más nos guste. Calentar un poco de aceite de oliva en una sartén y calentar la cebolla con el diente de ajo. Añadir una pizca de sal y dejar que se pochen unos 10 minutos, a fuego medio. Agregar el tomate, la hoja de laurel, el orégano y el tomillo. Remover bien y regar con el vino blanco. Salpimentar ligeramente y dejar que reduzca a fuego bajo unos 10-15 minutos.

Retirar el laurel y agregar las alubias, remover con suavidad y echar también el cuscús. Cocinar el conjunto suavemente un par de minutos y llevar a la fuente preparada. Distribuir por encima el queso feta desmenuzado, salpimentar y regar con un hilo de aceite de oliva. Hornear durante unos 25-30 minutos.

Preparar un aliño batiendo el perejil picado groseramente con la ralladura y zumo del limón, un poco de sal y unas 4-5 cucharadas de aceite de oliva virgen extra. Se puede triturar con una batidora para hacer una crema, o usar tal cual. Añadir a las alubias recién horneadas.

 

Con qué acompañarlas

Este plato es sustancioso, saciante y reconfortante, sin ser pesado. Con una ensalada sencilla o fruta de postre tenemos un buen menú vegetariano, siempre que no se nos olvide el pan. Es casi imprescindible.

 


Verdinas estofadas con boletus



Ingredientes (para 4 personas)

  • 300 gr de verdinas (legumbre)
  • Agua para cubrir y un poco más
  • 1 hoja de laurel
  • ¼ de cebolla
  • 2 boletus frescos (grandes)
  • Sal
 

Preparación (paso a paso)

Dificultad: Fácil – Tiempo: 2 horas y 15 minutos (15 m de elaboración, 2 h de cocción y 2 h de reposo)

Apunte previo: La víspera, dejamos las verdinas en remojo en agua para que se rehidraten.

Estofar las legumbres en una cacerola con agua (que las cubra), con un puñado de sal, una hoja de laurel y un cuarto de cebolla; y lo ponemos a fuego hasta que llegue a ebullición. Cortamos tres veces la ebullición, añadiendo un chorrito de agua fría cada vez que vuelva a hervir.

Dejamos que las verdinas se vayan haciendo y mientras, limpiamos los boletus con una servilleta de papel húmeda y los picamos en trozos de buen tamaño. En una sartén, los salteamos hasta que estén dorados por fuera, pero manteniéndolos jugosos en su interior. Cuando están listos, apagamos el fuego y reservamos.

Cuando las verdinas estén casi en su punto y hayamos rectificado de sal, agregamos los boletus a la cazuela y dejamos que el conjunto dé un hervor de 5 minutos para que se asienten e integren los sabores.

Consejo: La receta mejora si se cocina el día anterior al que se vaya a comer, porque se intensifican los sabores de los hongos.

 

Con qué acompañarlas

Una fantástica propuesta es servir un pescado al horno de segundo plato.

 


Lentejas con escabeche de pechugas de pollo



Ingredientes (para 4 personas)

  • 250 gr de lentejas
  • 1 cebolla
  • 1 zanahoria
  • 1 diente de ajo
  • 1 hoja de laurel
  • 1 pechuga de pollo (de las escabechadas)
  • Y para el escabeche…
  • 125 ml de aceite de oliva virgen extra
  • 200 ml de vinagre
  • 125 ml de vino blanco
  • 125 gr de zanahoria
  • 125 gr de cebolla
  • 3 diente de ajo
  • Tomillo fresco
  • Perejil
  • 2 hojas de laurel
  • 10 pimienta negra en grano
 

Preparación (paso a paso)

Dificultad: Fácil – Tiempo total: 45 minutos (1 5 m de elaboración y 30 m de cocción)

Apunte previo: Para el escabeche, podemos sustituir la codorniz por las pechugas de pollo y dejar que cuezan en escabeche durante 30 minutos. Una vez preparado, además, podemos consumirlo en ensaladas o, como en este caso, utilizarlo para enriquecer un plato de legumbres.

Para hacer las lentejas, las dejamos en remojo durante 30 minutos. Una vez remojadas, ponemos en una cacerola un diente de ajo muy picado, la cebolla picada y una cucharada de tomate y preparamos un sofrito.

Agregamos las lentejas escurridas y las rehogamos un minuto con los demás ingredientes, incorporando también la zanahoria y el agua necesaria para cubrir todos los ingredientes. Cocemos durante 20 minutos a fuego lento.

Cuando las lentejas estén prácticamente hechas, añadimos la pechuga de pollo cortada en filetes y dejamos que cueza con los demás ingredientes durante unos 5 o 6 minutos más, hasta que las lentejas terminen de estar en su punto.

 

Por qué consumirlas

Porque son una buena alternativa (y mucho más ligera) a las clásicas lentejas estofadas con chorizo o a las lentejas con costillas de cerdo, siendo igualmente sabrosas y deliciosas.

 


Crema de zanahoria



Ingredientes (para 4 personas)

  • 1 cebolla grande
  • 7 zanahorias medianas
  • 1 litro de caldo de verduras (o de zanahoria)
  • 150 ml de nata líquida para cocinar
  • Sal
  • Pimienta blanca molida
  • Aceite de oliva virgen extra
 

Preparación (paso a paso)

Dificultad: Fácil – Tiempo total: 30 minutos (8 m de elaboración 8 m y 22 m de cocción)

Pelamos la cebolla y la cortamos en juliana fina. Calentamos un poco de aceite de oliva virgen extra en una cacerola y pochamos la cebolla, a fuego medio, durante cinco minutos sin dejar que llegue a tomar color. Mientras tanto lavamos las zanahorias (retirando y desechando los extremos) y las cortamos en rodajas.

Agregamos la zanahoria a la cacerola, removemos y rehogamos un par de minutos. Regamos con el caldo, salpimentamos y llevamos a ebullición. Cocemos a fuego medio durante 15 minutos o hasta que la zanahoria esté tierna. Trituramos y añadimos la nata líquida. Mezclamos bien y servimos inmediatamente.

 

Con qué acompañarla

A esta crema le va de perlas un chorrito extra de nata líquida a la hora de emplatar, además de unos croutons, unos kikos triturados o un poco de cebolla frita crujiente. Es perfecta para la cena en días fríos si la tomamos bien caliente, pero también se puede disfrutar templada en cualquier otra época del año.

 


Crema de setas



Ingredientes (para 4 personas)

  • 500 gr de setas surtidas (pueden ser congeladas)
  • 1 cebolla
  • 100 ml de leche evaporada
  • 400 ml de caldo de verduras (o agua)
  • Sal gorda
  • Aceite de oliva virgen extra
 

Preparación (paso a paso)

Dificultad: Fácil – Tiempo total: 30 minutos (10 m de elaboración y 20 m de cocción)

Comenzamos limpiando bien las setas que vayamos a utilizar y cortándolos en trozos pequeños. Picamos una cebolla en brunoise y la pochamos a fuego lento en una sartén hasta que comience a tomar color. Agregamos las setas variados y los salteamos durante 10 minutos. Reservamos unos pocos para decorar al servir.

Pasamos el resto de las setas a un cazo, agregamos el caldo de verduras o el agua, y cocemos durante unos 10 minutos, triturando a continuación con una batidora de mano para dejar con textura de puré.

Añadimos la leche evaporada (si se quiere también puede utilizarse nata líquida) y mezclamos bien, dando un último hervor. Consejo: Servimos la crema en tazas de consomé, decorando cada una de ellas con dos o tres trocitos de setas.

 

Con qué acompañarla

Os recomendamos un buen vino blanco o rosado bien frío para una receta muy ligera que resulta muy saciante. Ello la convierte en un estupendo entrante o un reconfortante plato único, seguido de un postre ligero.


 

Crema de calabaza al eneldo



Ingredientes (para 4 personas)

  • 500 gr de calabaza
  • 400 ml de caldo de verduras
  • Eneldo fresco (un manojo)
 

Preparación (paso a paso)

Dificultad: Fácil – Tiempo total: 30 minutos (10 m de elaboración y 20 m de cocción)

Pelamos la calabaza, retiramos las pipas y los bigotes que tiene en su interior y la cortamos en pedazos de igual tamaño para que la cocción sea homogénea. Pesamos y utilizamos 500 gramos. La colocamos en una cacerola amplia y colocamos sobre ella el eneldo, sin los tallos (que desechamos).

Regamos con caldo de verduras y llevamos a ebullición el conjunto. Cuando arranque el hervor, bajamos el fuego y cocemos a temperatura suave durante, aproximadamente, 20 minutos. Consejo: El tiempo dependerá del tamaño de los trozos de calabaza. Si tenemos prisa, los cortamos más pequeños y se cocerán antes.

Recomendación final: Si nuestro caldo de verduras no está condimentado, será necesario salpimentar la crema en condiciones. De lo contrario, solo necesitaremos ajustarla ligeramente. Probamos primero para asegurarnos de no pasarnos con el punto. Cuando la calabaza está tierna, la trituramos y servimos inmediatamente.

 Con qué acompañarla

Ni que decir tiene que es un plato de cuchara que, en días de frío, sienta de maravilla a cuerpo y alma. Es una fabulosa opción para cenar ligero, que podemos acompañar de unas rebanadas de pan con mantequilla o queso crema. También podemos servirla con un chorrito de nata líquida y unas semillas para dar un toque crujiente al plato.

 

Sopa de fideos noodles al miso con atún y espinacas



Ingredientes (para 2 personas)

  • 2 unidades de atún fresco (en filetes)
  • 1 limón (o una lima)
  • Ajo granulado
  • 30 ml de salsa de soja
  • 150 gr de fideos noodles de huevo
  • 1 cebolleta
  • Jengibre fresco (un trocito)
  • 1 guindilla pequeña (opcional)
  • Pimientos de color (3 trozos pequeños)
  • Vino blanco (o mirin)
  • 15 ml de miso blanco
  • 1 litro de caldo de verduras (o pescado)
  • Espinaca fresca un buen manojo
  • Pimienta negra molida
  • Sal
  • Aceite de oliva virgen extra
 

Preparación (paso a paso)

Dificultad: Fácil – Tiempo total: 30 minutos (5 m de elaboración y 25 m de cocción)

Apunte previo: Secar el atún con papel de cocina, sazonar con pimienta negra y ajo granulado y masajear con zumo de limón o lima y 5 ml de la salsa de soja. Reservar.

Preparar los fideos noodles siguiendo las instrucciones del paquete, dejándolos al dente y escurriéndolos con agua fría para cortar la cocción. Mezclar con un poco de aceite y reservar.

Calentar un fondo de aceite en una olla o cazuela y añadir el jengibre picado o rallado y la guindilla. Dejar que suelte el aroma y agregar la cebolleta picada. Pochar con una pizca de sal unos minutos e incorporar los pimientos, regar con vino o mirin y dejar que evapore el alcohol. Añadir la salsa de soja, el miso y cubrir con caldo o agua, removiendo bien para que el miso se disuelva. Cocinar entre 10 y 15 minutos a fuego suave.

Al final de la cocción, añadir las espinacas ya con el fuego apagado y tapado. Comprobar el punto de sal, aunque con la salsa de soja normalmente no hace falta añadir mucha. Para terminar, cocinar a la plancha el atún marcándolo bien por ambos lados, al gusto.

Recomendación: Repartir los fideos en cuencos, cubrir con el caldo y añadir las espinacas y el atún. Servir con salsa de soja extra, guindilla picada, cebollino, sésamo o un simple golpe de pimienta.

 

Cómo tomarla

Para disfrutar esta sopa no hay más que servir los cuencos bien calientes y dejarse llevar por los aromas. Se puede tomar al estilo japonés, comiendo primero los fideos con palillos (por cierto, está bien visto hacer ruido al sorber) y bebiendo el caldo al final, o simplemente con una cuchara. Si las raciones no son muy abundantes es una receta perfecta para la cena como plato único sin más complicaciones.

 


Sorropotún de bonito



Ingredientes (para 6 personas)

  • 3 patatas
  • 1 kg de bonito
  • 1 cebolla
  • 1 pimiento verde italiano
  • Pan de hogaza
  • Agua o caldo de pescado
  • Perejil
  • Salsa de tomate una cucharada
 

Preparación (paso a paso)

Dificultad: Media – Tiempo total: 30 minutos (de cocción)

Comenzamos picando la cebolla en brunoise y poniéndola a pochar a fuego muy lento, como si la quisiéramos caramelizar. Consejo: Se trata de que vaya tostándose muy poco a poco para sacar un color uniforme y no trozos quemados y trozos más crudos.

Una vez pochada la cebolla, la retiramos del fuego y la escurrimos bien, quitando el exceso de aceite. Por otro lado, picamos el pimiento en trozos y las patatas en cachelos o trozos irregulares (es bueno desgarrar o escachar la patata al cortar cada pedazo para que al cocer suelte más almidón dejando así más trabado el caldo).

Freímos los trozos de pimiento, los mezclamos con la cebolla y añadimos las patatas, rehogando el conjunto. Cubrimos con agua (o caldo de pescado) sobrepasando un par de dedos la altura de las patatas y cocemos a fuego lento, dejando que todo vaya tomando sabor.

Aprovechamos para cortar la rodaja de bonito en tacos limpios. Si queréis podéis añadir una cucharada de tomate frito pero la receta original no lo lleva, aunque ayuda a dar un poco de color.

Cuando las patatas están ya cocidas, añadimos el bonito y unas rebanadas de pan blanco, dejamos cocer durante un par de minutos más y apagamos el fuego para evitar que se resequen las tajadas de bonito. Espolvoreamos con perejil y llevamos a la mesa.

 

Con qué acompañarlo

Siendo una buena alternativa al tradicional plato de marmitako, en ambos casos puede servirse como plato único, acompañado con un vino fresquito y completando con un postre ligero.


Patatas a la riojana



Ingredientes (para 2 personas)

  • 4 patatas
  • 1 chorizo fresco
  • 1 pimientos de color
  • 1 pimiento choricero
  • 1 cebolla
  • 10 gr de pimentón de la Vera
  • 10 ml de aceite de oliva virgen extra
  • Sal
 

Preparación (paso a paso)

Dificultad: Fácil – Tiempo total: 50 minutos (10 m de elaboración y 40 m de cocción)

En una cazuela se pone un poco de aceite de oliva y se dora la cebolla cortada en cuadraditos pequeños y el pimiento partido a la mitad. Se añade el chorizo sin piel en rodajas y se rehoga ligeramente. Echamos las patatas peladas, lavadas y cascadas en trozo regulares, no muy grandes, le damos unas vueltas al conjunto y agregamos el pimentón para que se haga un poco, pero evitando que se queme.

Por último, colocamos en la cazuela los pimientos choriceros abiertos y limpios y cubrimos con agua. Llevamos a ebullición y en ese preciso momento bajamos el fuego para que el guiso se haga lentamente. Cuando la patata esté casi lista salamos. Probamos el punto de sal en el caldo y rectificamos si fuese necesario.

Consejo: Si deseamos el caldo de las patatas más espeso debemos mover la cazuela de vez en cuando para ayudar a que las patatas suelten su fécula. De todos modos, podemos aplastar con un tenedor algunas junto a un poco de líquido y añadirlas.
 
Cómo comerlas

Esta receta tiene que servirse bien caliente, como todo buen guiso que se precie. Para nuestro gusto, mejor prepararlas bien temprano para que reposen un poco y la patata suelte más fécula, así el caldo se engorda un poquito más y queda mucho mejor. De todos modos, es conveniente hacerlas el mismo día, no es un plato que se deba guardar (al contener tanta patata se "estropea" de un día para otro).


Marmitako de bonito



Ingredientes (para 6 personas)

  • 1 kg de bonito
  • 5 patatas
  • 1 cebolla
  • 2 pimientos verdes italianos
  • 1 zanahoria
  • 2 dientes de ajo
  • 1 litro de caldo de pescado (o fumet)
  • 200 ml de vino blanco
  • 15 gr de pimentón dulce
  • Pimiento choricero (una cucharada)
  • 1 guindilla
  • 30 gr de salsa de tomate
  • 1 hoja de laurel
  • Aceite de oliva virgen extra
 

Preparación (paso a paso)

Dificultad: Fácil – Tiempo total: 30 minutos (10 min de elaboración y 20 m de cocción)

Comenzaremos picando la cebolla en juliana, el pimiento en tiras de mediano tamaño, para que se vean, y el ajo muy picado. En una cazuela grande y ancha, que nos permita remover los ingredientes, ponemos un poco de aceite y salteamos la cebolla, el pimiento y el ajo. Bajamos el fuego al mínimo, y añadimos la zanahoria, bien picada. Dejamos pochar los ingredientes para que se ablanden bien.

Ponemos el pimiento choricero en agua caliente, y sacamos su carne con el canto de una cuchara (también podemos utilizar la carne de pimiento choricero en conserva, que da un excelente resultado y resulta muy cómoda de utilizar). La incorporamos al sofrito junto a la guindilla y removemos bien.

Añadimos el vino blanco, y dejamos que evapore el alcohol. Pelamos las patatas y las cortamos en cachelos, desgajando un poco con el cuchillo para que los pedazos suelten más fécula, lo cual hará que el caldo resultante engorde un poco. Agregamos las patatas al guiso, junto a una punta de cuchillo de pimentón, y un buen pellizco de sal.

Subimos el fuego (fuerte) e incorporamos el caldo, las hojas de laurel y las dos cucharadas de tomate, removemos un poco y soltamos la cuchara. Consejo: Si se desea, se puede poner una ramita de perejil a cocer que después retiraremos.

Una vez que el caldo comience a hervir, bajamos de nuevo el gas al mínimo. Truco: A partir de ahora removeremos solamente agitando las asas de la cacerola. De esta manera, las patatas permanecerán enteras.

Dejamos a fuego lento durante unos 30 minutos, hasta que las patatas casi se deshagan, y aprovechamos para repasar los tacos de bonito, cortándolos en trozos de bocado, y retirando alguna espina que puedan tener. Pasados los 30 minutos, añadimos el bonito a la cazuela, apagamos el fuego y dejamos que las tajadas se hagan con el calor residual. Servimos tras cinco minutos de reposo.

Cómo comerlo

Es un guiso de pescado que se disfruta tanto recién hecho, en caliente, como en frío. Si el caldo os queda demasiado claro, podéis aplastar dos o tres patatas con el tenedor y después incorporarlas para engordar el caldo. Para acompañarlo, una copita de vino blanco de la tierra y un buen pan para disfrutar de la salsa.

Fuente: mas vida red