¡Escápate de puente!: los puentes más bonitos de España

Publicado el 03 de Marzo de 2023 en MasvidaRed

Un puente, según la RAE, es una construcción de piedra, ladrillo, madera, hierro, hormigón… que se construye y forma sobre los ríos, fosos y otros sitios, para poder cruzarlos. 

Más allá de su funcionalidad, hay puentes que representan algo más y son símbolos de gran belleza, historia y cultura. Incluso hay puentes que están considerados como los más largos de su época, algunos son romanos, medievales o árabes; otros son más modernos, pero todos ellos tienen algo en común, y es que son muy característicos e incluso son tan particulares y conmovedores que vale la pena conocer (y fotografiar). 

A continuación, te exponemos una pequeña muestra de los 10 puentes más fascinantes de España. Una selección que es otra buena excusa para hacerse una escapadita, ¿te vienes?

 

Puente Nuevo (Ronda, Málaga)

El puente Nuevo es el monumento más emblemático de la ciudad malagueña de Ronda, situada en el norte de la Costa del Sol, a unos 100 km de Málaga. 

La construcción del puente comenzó en 1759 para reemplazar el puente anterior que se derrumbó en 1740. Presenta un arco central de medio punto apoyado en otro más pequeño por el que transcurre el río, se pueden ver las huellas que dejó el agua hace mucho tiempo. Actualmente, el caudal del río es mucho menor, abriendo un pintoresco desfiladero donde se pueden tomar fotografías icónicas. 

El dato: Hasta 1839 fue el puente más alto del mundo con una altura de 98 metros. 

Recomendación: Ve con calzado cómodo, ya que los caminos para tomar las mejores fotografías no están bien conservados.
 

Puente de Vizcaya (Bilbao)

 

El puente colgante de Vizcaya es uno de los Patrimonios de la Humanidad de la UNESCO en España y conecta las dos márgenes de la Ría de Bilbao entre Getxo y Portugalete. Lo hace mediante una barquilla colgante de 25 metros de longitud que se desplaza horizontalmente se puede llegar de una orilla a la otra. Consiste en una estructura compuesta por cuatro torres de hierro, conectadas por un travesaño para formar una estructura de 160 metros de largo. 

El dato: Construido en 1893, fue el primer puente de tráfico del mundo equipado con una góndola de transporte para transportar automóviles y pasajeros. 

Recomendación: Es un puente que asombra con las vistas que ofrece de la desembocadura del Nervión en el Cantábrico, un espectáculo perfecto para el disfrute y la fotografía.
 

Puente Romano de Córdoba 

El puente romano de Córdoba se encuentra sobre el río Guadalquivir, uniendo la zona del Campo de la Verdad con la zona de la Catedral de Córdoba. En sus 2000 años de historia ha sufrido muchas transformaciones, como es de esperar. 

El dato: Hasta mediados del siglo XX fue el único puente de la ciudad. 

Recomendación: Ten en cuenta que a lo largo del puente hay lugares a los que debes acercarte. En el lado norte, está la puerta del puente, la cual da la bienvenida a cualquiera que entre en Córdoba, y también está el guardián de los cordobeses (el Arcángel San Rafael). Además, tienes la torre de Calahorra que no puedes perderte.
 

Puente de Triana / Isabel II (Sevilla)

Hasta el siglo XIX Sevilla no tuvo un puente estable que comunicara su centro histórico con el barrio de Triana. De hecho, no había ninguna construcción de este tipo sobre el Guadalquivir entre Córdoba y su desembocadura, en Sanlúcar de Barrameda (Cádiz). 

Para su construcción se inspiraron en el puente de Carrousel, sobre el río Sena, que a día de hoy ya no existe. Los arcos metálicos que existen bajo los ojos de esta construcción ya no tienen una finalidad estructural, sino meramente ornamental. Estas estructuras, precisamente, lo convierten en uno de los puentes de hierro fundido más antiguos de España y el más emblemático de la ciudad. 

El dato: Su construcción finalizó en 1852, bajo el reinado de Isabel II, motivo por el que ostenta dicho nombre.
 

Puente Viejo de Besalú (Girona)

El puente medieval de Besalú es uno de los monumentos más icónicos de la Garrotxa, comarca prepirenaica que se sitúa a 40 km de Girona. Este puente mide 105 metros de largo y 30 metros de alto, con una torre incluida. Las torres y el portal del puente, que servían para defender el acceso a la ciudad y para cobrar un peaje en la Edad Media, fueron derribados en 1880. 

El dato: En 1939, durante la Guerra Civil Española, la voladura de dos arcos dejó el puente en un muy mal estado, hecho remediado tras la reconstrucción llevada a cabo entre los años 50-60 del siglo XX.

Recomendación: Es una zona volcánica con bosques de ensueño que merece la pena visitar. Este puente está catalogado como Bien de Interés Cultural a nivel nacional y a nivel autonómico, como Bien Cultural de Interés Nacional por parte de la Generalitat, lo que lo convierte en una parada obligatoria si estás por la Garrotxa.
 

Puente de Rande (Pontevedra)

El puente de Rande es un mítico y majestuoso viaducto con tirantes que forma parte de la Autopista del Atlántico. Abierto al tráfico en 1981, cada día lo cruzan unos 50.000 vehículos y es uno de los puentes más característicos de España. La longitud total del puente es de 1.558 m. Su altura es de 48 m sobre el nivel del mar, suficiente para que cualquier barco pudiera transitar bajo él. 

El dato: En el momento de su inauguración era el puente atirantado de mayor longitud del mundo. Además, era el puente de cualquier tipo más largo de España. 

Recomendación: Desde su altura, te permitirá contemplar la isla de San Simón, las Islas Cíes y la inmensidad de la ría de Vigo. Por ello, desde uno de los miradores de Vigo, la vista es espectacular viendo cómo cuelga impetuosamente sobre el mar.
 

Puente de Piedra (Zaragoza) 

Con una longitud de 225 metros, es el puente más antiguo que cruza el río Ebro y cuyos orígenes se remontan a la fundación de la ciudad, hace 2.000 años. Y si bien ha quedado de referencia que sus orígenes son romanos, el puente que vemos actualmente es del siglo XV, iniciando su construcción en 1401 e inaugurándose en 1440.

El dato (y la recomendación): Importante saber que el Puente de Piedra te llevará hasta el Balcón de San Lázaro, donde podrás conseguir una de las mejores fotografías que servirán como recuerdo de tu visita a la ciudad.
 

Puente de San Pablo (Cuenca)

 

Puede que no sea uno de los más bonitos, pero forma parte y permite disfrutar (y contemplar) uno de los más bellos paisajes que tenemos en España, la Hoz del Huécar, en Cuenca. Y es que el puente de San Pablo está situado justo en mitad de la Hoz y sirve de unión entre el Parador Nacional de Cuenca y las sorprendentes Casas Colgadas. 

 

El dato: El puente actual, de estructura de hierro, fue inaugurado en 1903 y fue construido para sustituir al anterior que era de piedra con cinco arcos de pilares toscos de los que aún quedan algunos restos.

 

Recomendación: La zona es una de las más bonitos y desconocidas del país, así que no dudes en darle una oportunidad y, si no lo has hecho, descubrirla sin prisas.
 

Puente de Alcántara (Cáceres) 

El puente de Alcántara, de origen romano, fue construido entre los años 104 y 106. Ante todo, destaca por su grandeza y por la firmeza que hoy en día conserva, casi intacta a pesar de tener casi dos mil años de antigüedad. Tiene 58,20 metros de altura y 194 metros de longitud, las dimensiones necesarias para permitir el paso de un gran caudal de agua durante las crecidas del río Tajo. 

El dato: Este puente fue declarado en 1924 Bien de Interés Cultural con categoría de Monumento y es, sin duda, un deleite de visita obligatoria. 

Curiosidad: No te pierdas el pequeño templete de la entrada del puente con una inscripción que menciona al arquitecto: “El puente, destinado a durar por siempre en los siglos del mundo, lo hizo Lácer, famoso por su divino arte”.
 

Puente de San Juan de Gaztelugatxe (Vizcaya)

Si eres fan de la serie Juego de Tronos, este puente te resultará familiar. En la ficción, la zona se convierte en Rocadragón, la casa tradicional de los Targaryen. En la vida real este puente está situado entre las localidades vizcaínas de Bermeo y Bakio, uniendo el islote de Gaztelugatxe y la península con dos arcos. 

El dato (y la recomendación): El puente y toda la construcción, fue levantado durante el siglo XI. Una vez cruzado el puente se suben 241 escalones que llevan a la ermita de San Juan (dedicada a San Juan Bautista), una de las más espectaculares del mundo y con unas vistas únicas. Sin duda, si estás en la zona, no puedes perdértelo.

 

Como ves, los puentes sirven no solo como estructuras para el transporte, sino también como obras maestras arquitectónicas y símbolos de la innovación humana. Desde los antiguos puentes arqueados hasta los modernos puentes colgantes, cada puente tiene su propio diseño único y características que no solo mejoran su funcionalidad, sino también su atractivo estético. Ya sea que crucen ríos, valles o incluso océanos, estas magníficas estructuras brindan una experiencia visual impresionante para aquellos que aprecian su belleza. ¡No te los pierdas!